miércoles, 22 de septiembre de 2010

momentos de poesía volumen 16

 Olvido (Romeo Molina)
Un dia me dejaras  tus medias horas
como una sombra sobre mi
para sufrirte,
Me dejaras tus ecos,  tus miedos y tus risas
y tendre que cortarme las venas
 para liberarme de ti

Un dia me dejaras tus besos como abrigo
y sera tu piel  sobre mi piel
y tu nombre  lo dejaras en nudociego con el mío.

Un dia buscare los bejucos de tu cielo
en una puerta ciega
como el olvido.

( Dedicado a mi amor imposible)

No Es Sorpresa  (Jose Reyes)

Ya no es sorpresa encontrarse un angelito
Embriagándose en un bar
Y blasfemando contra la democracia,
Ver como se desnuda
Y te muestra sus pudores
Ver como se levanta por la mañana
Con un espasmo al desconocer tu cama,
No es sorpresa
Que te maldiga con toda intención
Y que luego de llorar por la calle como una Magdalena
Entre en cualquier iglesia y pida perdón por los pecadillos
Recién patentados,
No es sorpresa que el próximo sábado
Se repita la historia en otro bar
Y como buena penitente blasfeme contra las petroleras
Y los armamentistas americanos.

Dame Tu Permiso ( Nair latoff)
Continuo aguardando
que me des tu permiso
para instalarme en tu rio
y ser el lecho fiel de tu destino.

Deseo ser fuente de primavera
y evaporar tu dolor y tu desvelo
almacenando la miel de mi panal
en tus heridas de acero.

Luchare siempre a tu lado
cuando el invierno el calor mezquina
recogere nuestro amor congelado
y te buscare por todas tus esquinas.

Gozaremos de las cascadas...
de un volcan de luz y calor
cotidiana entrega del amor
que yacera en cenizas calidas.

Con mi piel erizada y deseosa
y mi corazon maltrecho
te amare con mi mirada ansiosa
y me abrazare fuerte a tu pecho.

Tus versos endulzaran mis lágrimas
con la ternura de tus palabras
cubriran nuestros cuerpos mis sabanas
y tus poemas anidaran en mis entrañas.

(Dedicado a Romeo Molina)

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viernes, 17 de septiembre de 2010

Opinión, Poesía, y Un Cuento.Volumen 2


Las Mulas Políticas ( Romeo Molina)

¡Que Pena! A una gran mayoría de la población le gusta lo vulgar, lo corriente, siguen a líderes prepotentes, mal hablados, los que disparan con flechas y sombreros discursos folklóricos que seducen la ignorancia.

La gente se cuelga camisetas consientes que no tienen posibilidades de ser tomados en cuenta por los elegidos.

Mulas políticas, los que se ponen el traje de payaso y se pintan la nariz de rojo, azul y blanco, o de amarillo o solo de anaranjado, o verde, todo depende del color que sea la bandera del circo. Hambreados pero en calidad de títeres del partido,  olvidados y regresados  al baúl de la miseria.

Un ejemplo: El gobierno actual, al cual el pueblo se abrazó como lo hace un naufrago.

Enfermos de negligencia extrema golpean y derriban el desarrollo del país, la separación de poderes los ha hecho cometer errores groseros que contribuyen al retroceso en la economía nacional.
El desamor entre el Presidente Mauricio Funes y el partido que lo llevó al poder es una muestra de lo desorientado que esta la dirección de El Salvador.

El grito de auxilio de la población se escuchó hace unos días en todo el territorio nacional, cuando las pandillas o maras pusieron de culo a las autoridades que no tuvieron reacción alguna.
La criminalidad es una tormenta desgranada en zozobra que cae sobre el pueblo, mientras los muertos en vida, partidos que perdieron el poder,  deambulan queriendo seducir nuevamente a las grandes masas.
Intentan resucitar la confianza en las mulas políticas para que los lleven a oler nuevamente la madera de la silla presidencial.

A esto agreguemos el show de los diputados independientes que saltan como micos de rama en rama según les pinten las conveniencias o huyen como ratas de sus partidos buscando mejoras económicas y políticas.

Hasta cuando pueblo haz de despertar para dejar de ser marioneta en las piernas de la política…

Poesía

 Hablar De Esa Noche (Jose Reyes)
Podríamos hablar de esa noche
O simplemente callar como inocentes camino al patíbulo,
Podríamos ignorar las horas
O repetir los sueños
Compartir nuestras aventuras por esas calles
O las desventuras de nuestras camas
O simplemente disfrutar nuestra presencia
En esta tierra,
Podríamos callar mil veces con el vértigo latiéndonos
A mil por hora
O también podríamos ir a la cocina
Y prepararnos un minuto de sencillez,
Regresar a nuestro idilio y leer las palabras de mis amigos
De tus amantes,
Podríamos amanecer abrazados
O podríamos despedirnos clandestinamente como águilas antárticas
O albatros en alta mar,
Podríamos hacer tantas cosas como eso de ignorarnos en el silencio
Y buscarnos en las angustias
O simplemente por voluntad divina dejarnos a la deriva de nuestros sueños


Jose Reyes, Poeta Nacido en El Salvador, actualmente reside en la ciudad de Hempstead, New York, Estados unidos, ex-estudiante de la Universidad Tecnologica, escribe desde los 12 años.
Su material gran partes inédito.






Yo  Pecador ( Romeo Molina)
Peco
Cuando la noche  se marea
en la  bondad de mis amores,
cuando la confusión de los  astros  ilumina mi tinta
en el bosque  de mis   vuelos.
Ahi peco
Al desearte como lo hago
al penetrar con ilusiones las cordilleras de tu vientre,
cuando me embriago en el mercado de tus pechos.
ahí peco
Cuando la imagen desorientada de tu cuerpo tendido
quiebra el vidrio de mis miradas.
asi peco
cuando empaño la ventana con besos improvisados
y recito con Sabina poemas alquilados.
Asi peco
cuando te deseo como siempre lo hago.

Cuentos

El  Peñón Del Mas Allá (Romeo Molina)
Casimiro Díaz estaba arto de tanta miseria, los sembradillos no estaban dando lo esperado y el dinero estaba muy escaso.
_Dale gracias a Dios viejo que aún no pasamos hambre y las cosas nuestan tan mal - Le decía Maria su Mujer.
_Pá tener pistillo(dinero pues ) Hua ser un pacto con el Diablo, ya verás mujer.
_Que Dios te perdone por lo que decís ¡tas bien loco Casimiro!
_Nues locura Mariyita , voy a pactar con el cachudo pá salir de pobre y darte las cosas que te mereces.

Aquella idea no lo dejaba tranquilo y durante el día visitaba diferentes brujos de la zona pidiendo instrucciones para invocar a Lucifer.
Decidido a tener un encuentro con Satanás, regresó a su casa al finalizar el día llevando una sonrisa macabra.
_ ¿Y vos que tenés Casimiro? _ Le preguntó su mujer.
_Nada mujer, solo dame de comer que ya me voy pal cerro.
_¿Y para donde vas tan apurado?
_A ver al diablo, él y yo tenemos quiablar.
_Tás bien loco, ya decíya yo que de tanto chupar guaro, íbas a quedar chiflado.

Ignoró las palabras de su Mariyita, se tiró al hombro una vieja mochila y abandonó la casa rumbo al cerro de Santiago de Maria, llevaba candelas y hierbas para hacer el ritual.
La noche se aproximó cuando estaba llegando a la hondonada, ahí, Casimiro empezó su culto y sus negras oraciones.
_Ven a mi Satanás, ven a mí, yo tu siervo te imploro _Rezaba.
Una fuerte brisa azotó los árboles que impotentes se quejaron haciendo un extraño ruido que llegó hasta el valle. La luna que había salido besaba las faldas verdes del cerro y luego desaparecio con la oscuridad que cubrió los caseríos.
Las estrellas se habían caído del cielo y los lugareños salieron de sus casas para ver hacia el monte, el ambiente había cambiado de repente, caliente y sofocante.
_Alguien esta llamando al Diablo_Murmuró un campesino.
La gente se encerró en sus viviendas y de rodillas pidieron el amparo de Dios.

A medio ritual, Casimiro se arrepintió, pero ya era demasiado tarde, ya no
había marcha atrás, el Diablo había acudido a su llamado.
Un grito desgarrador se escuchó en los caseríos cercanos y una mujer anciana murmuro:
_Algo ha salido mal y Satanás se quedará en este lugar para siempre, que Dios nos libre de todo lo que viene.
Casimiro no volvió a casa nunca mas y desde entonces la gente cuenta muchas cosas, hay quienes dicen que el Demonio se lo llevó en cuerpo y alma, otros, cuentan que lo han visto cruzar las quebradas del cerro.

María vive metida en la iglesia, rezando por el alma de su tonto marido y por los tres hijos que le quedaron.
Los leñadores dicen que en el corazón del cerro una hierba mala ha crecido desde aquel día y que todo aquél que la pisa se pierde, también dicen que una vereda angosta se ha formado entre la maleza hasta el lugar exacto donde el pobre hombre se perdió y donde casimiro levantó el altar, un enorme peñon se formó, quizás es una señal o un templo al Demonio, la gente le llama : El Peñon del Más Allá.
En la época del café, muchas personas se pierden y cuentan que de la nada se les aparece un hombre vestido de blanco, que les toma de la mano y les ayuda a salír.
Algunos dicen que es un angel enviado para vigilar a Satanás, pero hay quienes dicen, que ese hombre… Es Casimiro Diaz.
El extraño hombre solo puede ayudar a los que pisan la hierba mala, pero aquéllos que bajan hasta el peñon, no tienen salvación alguna.

El padre Felipe, viejo párroco del pueblo, sabe como vencer el mal, pero nadie se atreve a pelear con él, el cura dice que un niño no mayor de ocho años debe bajar por la vereda hasta el peñon donde Casimiro puso su altar y estando allí, debe sembrar una cruz de oro preparada por la iglesia, arrodillarse y gritar en ese momento tres veces el nombre de Dios.

“La gente jamás se atreverá a algo así y por mucho tiempo, quien sabe cuanto, en ese lugar de Santiago de María… El diablo estara presente”.









viernes, 10 de septiembre de 2010

Momentos De Poesia Vol.15 y Un Cuento.


Detestame  (Jose Reyes)

Detéstame por mi cercanía
A tu piel
Detéstame tanto o mas
A como detestas la cebolla
O simplemente detéstame
Por mi adicción a la cafeína
O por mi apego a ser noctámbulo,
Detéstame con voluntad propia
Por robarte minutos de sueños,
Detéstame agriamente
Como lo haces con las cucarachas
O con los ratones que no son caricaturas
Detéstame por ser un “pelaito guanaco”
Por no respetar a tus santos y vírgenes
Por esperar tus llamadas
Con la algarabía de un año nuevo,
Destétame por robarte besos
Con tu propia voluntad
Por confundirte en tu propia confusión,
Detéstame integralmente
Como detestas los partidos de futbol
Detéstame una y otra vez
Como rompes con tus temores
Pero por amor a tus santos
Detéstame después de decir que me quieres.


jOSE rEYES





Poeta nacido en El Salvador, ex-estudiante de la Universidad Tecnologica de este país, actualmente radica en la ciudad de New York Estados Unidos, su poesia, la mayor parte de su obra es inédita.

 
 
 
 
 
 
Pense Que Volverías _Fábula (Romeo Molina)
El tiempo pasa a dejarme ramas con nidos,
en ellos las estrellas son pájaros,
y las avispas olvido de un día.

La ciudad me destila tormentas
y en la sastrerias del patio
los grillos tejen alas al viento.

Una rata cuenta sus monedas
con el ruido de un gato que hace el amor sobre las tejas.

Pensé que volverías
Y espantaríamos juntos a ese caracol ceniciento
que me canta soledades con guitarra.

Pense que volverias
y cortariamos cerezas de la luna
a recoger conmigo los olores de la lluvia
a remendar los ríos de una lágrima
y a espantar al zorro
que aulla en nuestro libro.

Pensé que volverías
y le quitariamos la embriaguez al espacio vacío
que existe en la risa de los cuartos.

Pensé que volverías
a pintar conmigo las letras deshojadas del camino
a dibujar el vuelo de la golondrina
y a robarnos el azul del cielo
para coserle un par de zapatos al traspatio.

Pense que volverias
y sanaria con tus labios mi locura.


El Coyote Del  Diablo (Romeo Molina)

Diciembre había llegado con sus recuerdos y las calles se vestían de colores abriendo puertas a los carnavales…
Todos los días al caer la tarde, Manuel, Carlos y José, se reunían en la esquina de uno de los portales de la ciudad de Chalatenango para hablar de las cosas que habían vivido durante la guerra.

En la memoria de José, estaba el recuerdo de un suceso diabólico que él presenció durante el conflicto armado y que jamás había podido olvidar.

Todo empezó algunos años atrás…

Era José una persona humilde, había vivido toda su vida en las afueras del pueblo pastando el ganado y cuidando caballos, también cultivaba la tierra y se mantenía alejado de las ciudades para evitar ser reclutado.
Por años lo había logrado, hasta que una mañana de mayo de 1986, todo cambió para él, mientras regresaba a casa después de ordeñar las vacas, un grupo de soldados  que hacian un reten lo detuvieron...
_Este baboso yastá gueno pá ser soldado _Dijo un sargento.
Lo sujetaron por la fuerza y lo subieron a uno de los camiones, José suplicaba que lo soltaran.
_Dejenme ír, mis tatas yastan viejos y solo me tienen a mí.
El sargento le pegó una pechada y un culatazo con el fusíl…
_No sea culero hijueputa, aquí le vamos enseñar a ser hombre, cabrón.
_Amarren bien a la mariquita_Se burló un soldado.
_Si llora culerito, le voy a meter mi bota y mi pie izquierdo en el culo, semejante hijuesesentaputas _Le amenazó el sargento.

Tres meses lo entrenaron en el cuartel del Paraíso en el mismo Chalatenango, allí se encontró con Macario Lopez y Lito Cuevas, amigos de infancia y quienes habían sido reclutados dos meses antes que él.

Cuando cumplieron con el período requerido por el cuartel militar, fueron enviados a cuidar la presa del Cerrón Grande
_A encaramarse al camión, reclutillas maricas_Les ordenó un oficial.
Se subieron al vehículo y se acomodaron en una esquina, con el fusíl, la mochila y el alma entre las piernas.
_Hoy nos vamos artar puras tilapias frescas camarada _Dijo Lito.
_Eso si es verdad, dicen que ahí hay tremendos pescadotes _Respondio Macario.
José parecía no escucharlos, estaba como ausente, quizás sentía miedo o quizás nostalgia por haber dejado a su familia, extrañaba sus viejos, sus vacas y sus caballos.
En horas de la tarde llegaron a la presa, ahí fueron recibidos por una mancha de mosquitos hambrientos que se lanzaron sobre ellos sedientos de sangre nueva.
Sacaron de sus bolsillos los arrugados cigarros y los prendieron para ahuyentar a los desesperantes insectos.

Durante la noche pescaron algunas mojarras y las cocinaron a fuego lento y después de comer se atrincheraron en puestos estratégicos.
La Fresquera, uno de los soldados con más tiempo en la presa se acercó a ellos y les dijo susurrante…
_Tengan los ojos bien pelados, que aquí, hasta los más machos se ahuevan.
_ ¿Por qué? ¿Por los guerrilleros? _Pregunto José.
_ Los guerrilleros nos atacan casi todas las noches, pero lo que da miedo, no son los tiros de esos hijos de putas, son las apariciones del mismo Diablo.
_¿Acaso aquí asustan?_Interrumpió Macario.
_Más que eso camarada, aquí se te aparece el cachudo en persona, el merito Lucifer pues.
_iSanta Virgen de Guadalupe!

Antes de caer la medianoche, un grupo de subversivos los atacó por el lado norte del río, ellos repelieron el ataque desde sus barricadas. De repente, los guerrilleros dejaron de disparar y se alejaron corriendo y gritando como locos.
_A ésos ya se les apareció el diablo _Dijeron.
Durante treinta días estuvieron defendiendo la presa, la guerrilla atacaba y siempre terminaba corriendo en retirada río abajo.

A finales del mes, el sargento Gomez reunió a la tropa y les dijo:
_Debido a que nos han causado algunas bajas, no a todos les daremos licencia, deben comprender que el descanso sera sorteado.

José salió favorecido y con su mochila al hombro se fué a ver a su familia, sin embargo, Lito y Macario se tuvieron que quedar mientras llegaban los refuerzos, tres días pasaron cuando otro pelotón de reclutas llegó a la presa y el sargento les dió licencia a los que esperaban.

Una tarde, dos días despues mientras compartían los tres en un bar de la ciudad, un soldado que había salído con ellos llegó corriendo.
_Prendan el radio _Les dijo.
_¿Que pasa con vos camarada? ¿Por qué quieres que encendamos el radio?
_Que lo enciendan cabrones…
Se les fue el alma cuando escucharon las noticias…

“Más de quinientos guerrilleros han atacado la presa del Cerrón Grande, las tropas del ejército no han podido contener el brutal ataque. Se dice que las fuerzas subversivas han masacrado a la tropa y se han tomado la base.”

_¡ Dios mío! De la que nos salvamos _Exclamó José.
Según las noticias, los soldados que sobrevivieron al ataque habían sido ajusticiados por un comandante de la guerrilla apodado el Perro.
Un boletín del ejército fue recibido de inmediato por ellos, El Cuartel del Paraiso cancelaba todas las licencias y pedía a los soldados que se incorporaran al servicio.

Cuando llegaron a la presa todo estaba destruído, al soldado La Fresquera lo sepultaron cerca de las letrinas, era dificil trasladarlo en las condiciones que lo dejaron, estaba despedazado y le faltaba la mitad de la cabeza.

Al llegar la noche, José y Macario fueron enviados a la trinchera más cercana al río, José estaba muy nervioso y sin pensar encendió un cigarrillo.
_Apague esa mierda camarada, que nos van a volar los sesos_Le regañó Macario.
Apagó rapidamente el cigarro y ajustaron sus fusiles, mientras una densa oscuridad se acercaba cubriendo el lugar y formando siluetas entre los árboles.
_Aguánteme tantito que voy pal baño a cagar_Pidio Macario dejando a los pies de su compañero el arma.
Se escuchó un grito desgarrador desde las letrinas, a José se le erizó el cuerpo y corrió a buscarlo,  encontró  a su compañero con los pantalones abajo y corriendo hacia él.
_¿Qué le pasa compañero?
_Lo vi...lo vi ...
_¿A quién vio camarada?
_Vi a la Fresquera, lo vi, estaba cubierto de sangre y le faltaba la mitad de la cabeza, asi como  cuando lo enterramos.
Macario temblaba, no podía levantar su fusil, respiraba agitado y trataba de tomar un poco de agua de la cantinflora que llevaba en la cintura.
_A éste el desvelo lo tiene así_Murmuró José en sus adentros.
Lo tomó del brazo y lo recostó en la trinchera, un ruido proveniente de las letrinas le hizo voltear, soltó a su amigo y se acercó sigilosamente. Alguien estaba fumando en uno de los servicios pero  al asomar la cabeza por poco se orina del susto.
Un soldado con media cabeza estaba sentado en el inodoro con un cigarrillo en la mano, al ver tal aparición salio corriendo como loco hasta la trinchera.
_¿Se le apareció a usted también?¿Lo vio camarada?
_Sí,  también lo vi, si, lo vi, encomendemonos a Dios, ore conmigo Macario…Padre nuestro que estas en las alturas no nos dejes caer en tentación …_Rezaron.

Durante las noches siguientes, los soldados que hacían la guardia se toparon con soldados decapitados, se decía que estaban penando por culpa de ese comandante guerrillero que les cortó la cabeza a machete limpio y sin piedad.
Una noche  se atrincheraron, los guerrilleros habían cruzado el río y trataban otra vez de tomarse la presa, todos esperaban el ataque, pero antes de hacer el primer disparo, alguien gritó:
_Miren allá en el río, ahí esta …Es El Coyote del Diablo.
A la orilla del río un enorme animal se paseaba de un lado a otro, parecía estar buscando comida, atrás de él un pelotón de soldados deambulaba en circulos.
_ ¡Santo Dios! Esos son nuestros compañeros que andan penando_Dijo Lito.

El  sargento Perez agarró su fusíl y le apuntó al animal, pero no pudo disparar, el arma se le encasquilló como a todos los que intentaron tirarle.

La noche se fue despidiendo lentamente arrastrando sombras, al amanecer había niebla sobre la presa y el frío saltaba los puestos de guardia sin misericordia, a la hora del rancho todos comentaban los acontecimientos ocurridos durante la noche.
_¿Vieron todos a ese animal?_ Preguntó el sargento.
_Ése nues animal, esés el merito Lúcifer convertido en coyote_Conestó un recluta.

Ésa fue la única noche en que la guerrilla no les atacó, pero al día siguiente aprovechando la neblina los guerrilleros pudieron llegar mas cerca de la base militar y esperaron escondidos atrás de los matorrales y las piedras. El sol se había pasado al bando de los insurgentes, no alumbró la presa en todo el día y la noche llegó más negra que antes.

A las 8:35 pm los soldados fueron atacados por los cuatro lados, el traqueteo de las ametralladoras y fusíles era ensordecedor, era imposible decifrar el ataque.
A media noche hubo silencio, los fusiles callaron por unos minutos dejando un olor a pólvora esparcido en el aire.
_Esten agujas sobre esos hijos de puta _Gritaban desde alguna trinchera.
Cuando estaban a punto de reanudar el enfrentamiento, un enorme coyote negro apareció saltando las trincheras de los soldados.
_Maten a ese animal _Ordenó el sargento.
Esta vez todo el que intentaba matarlo terminaba corriendo como loco hacia el río, tenía el animal unos enormes y filosos colmillos, sus ojos resplandecían como fuego y nadie lo pudo parar.
El tiroteo se reanudo y luego fue bajando poco a poco, las bajas sufridas por parte del ejército fueron minímas, al amanecer con la luz de la mañana revisaron la zona de combate, encontraron dieciseis guerrilleros con el cuello despedazado flotando sobre el agua.

Despues de aquel siniestro día, el animal estuvo ausente y los guerrilleros tenían temor de cruzar el río.
Dos semanas despues, un sabado al mediodía, un habitante del valle más cercano llegó a la base y le informó al sargento Perez sobre la presencia de más insurgentes.
_Yo vi cinco camiones repletos de guerrilleros, vienen del otro lado de Chalatenango, también les escuché decir, que se van a tomar otra vez la presa_Le dijo.
El sargento le dio provisiones para su familia y le agradeció la información, luego mandó cuadrillas de soldados a internarse entre la maleza para esperar y emboscar al enemigo.

Al terminar la tarde empezó otra vez el tiroteo, sin embargo la guerrilla no atacaba a los militares, a lo lejos se les veía correr y tirarse a las aguas profundas del río. luego reinó un macabro silencio.
Por mas de diez minutos nadie se movió, miraban a todos lados sin entender nada hasta que el silencio se quebró en las trincheras del frente, los soldados disparaban a lo loco y saltaban corriendo hacia el agua, entre ellos Macario y Lito.
José, el sargento Perez y otros les dieron alcance antes de que se lanzaran a lo profundo de la presa, evitando así que se ahogaran. Durante la noche tuvieron que ser amarrados para controlarlos, se pasaron las horas gritando y diciendo incoherencias.

A primera hora del siguiente día, un helicóptero de combate llegó por ellos y se los llevaron al hospital militar, ahí los médicos los declararon trastornados y los trasladaron a un centro para enfermos mentales.

Un sacerdote del pueblo La Reina,  al enterarse  de los sucedido  llegó a la presa para hacerle un exorcismo y otros rituales religiosos,  intentando asi de alejar  al diablo de ese maldito lugar.
Abajo de la base militar encontraron una cueva cubierta de azufre y fuego, el sacerdote dijo que esa puerta conectaba a la presa con el infierno.
_Vamos a sellarlo todo_Dijo.
Dejó caer en su interior una enorme cruz de plata ungida con agua bendita, la cueva se selló provocando un enorme terremoto que destruyó las trincheras militares,  obligando a los soldados a abandonar la base.

Hoy en día, la presa es una zona desierta, aún funciona, pero ya nadie se atreve a entrar a ese lugar, porque donde murieron tantos reclutas rondan legiones de fantasmas.

José y el sargento Perez, visitan cada mes a sus compañeros en el hospital, ellos en su locura les miran llegar y parece que se alegran, sin embargo ya no saben quienes son ni como se llaman.

Ellos… Están peleados con la realidad y sus fusíles estan apuntando a una locura sin tiempo que les ametralla sin piedad la razón.
Algunos dicen que la presa sigue custodiada por un pelotón de soldados en pena y a pesar que hace muchos años terminó la guerra, algunos aún siguen combatiendo con esos fantasmas, que de pronto y sin aviso alguno… cobran vida en sus memorias…


Este cuento ha sido tomado de Las 9 Campanadas Del Diablo escrito por Romeo Molina. es un relato real.

(Derechos reservadosVocesyLibertadä@05106700889)























miércoles, 1 de septiembre de 2010

Poesia Y Refelexiones Volumen 3

Las Lágrimas De Un Padre (Romeo Molina)
_Papito, tu siempre seras mi gran amor.
_Lo se mi niña, se que me amaras por siempre.
_Cuando yo sea grande  te cuidare con todooo mi  corazón.

17  Años después...29 de Agosto 2010.

_Hija, estoy muy enfermo ¿ tienes unas monedas para pastillas que alivien  mi  dolor?
_Ay, papá, que molestas,  no hay, solo queda para el pan_Gritó.
_¿Porque siempre me respondes mal? Soy tu padre debes respetarme.
_¿Y que con eso? ¿Que pasa pues?
_Un dia te dare en la boca para que respetes a quien te dio la vida y te cuidó.
_Te podriras en la cárcel, si lo haces, es mas,  vete, vete,  no te quiero aqui.

Dos minutos despues, estaba frente a la puerta, una bolsa  de plástico en la mano donde cabía su equipaje,
miró hacia los pasillos del condominio que se abrieron ampliamente hacia la calle y no quedó mas que marcharse, mientras  los expendios de aguardiente le abrian los brazos con boleros manipuladores, se hizo el desentendido y camino a la parada de buses.
_¡Demonios!_Eclamó al darse cuenta que no tenia dinero.
El sonido de unas monedas en el bolsillo izquierdo  lo alivió un poco, subio al autobus y pegando  su rostro a la ventanilla recordó el dia en que nacio su nena...
_  su primero años cuando le cambiaba sus calzoncitos, los dias de desvelo  cuidandole con amor,  enamorado de su creatura.
_Las tardes jugando al hospital, cuando ella era  doctora  y curaba con besos.
_El dia que lloraron abrazados en el Estadio Cuscatlán porque el Atlético Marte le había metido 4 goles a cero al Firpo
_Los días de péliculas en casa  tendidos sobre el sillón.
_LAs tardes de complicidad en alguna travezura en el patio.

Se sintio apenado al volver a la realidad, su rostro estaba empapado de llanto y la gente lo miraba con curiosidad, secó con el reves de su mano sus  lágrimas y  bajó de prisa frente al Parque Cuscatlán.
¡Como habían cambiado las cosas! el cuento  ya no era tan bello, ya no era el mejor papá del mundo, ya no era su nena, Arely era una mujer casada y con hijos.

Enfermo, sin dinero  y con hambre miró los puestos de  comida en el lugar, apenas tenía para ir a la terminal de buses. quizas ahi dormiria. o quizas un buen hombre le diera un aventon a cualquier parte del país.
El cielo se caía a pedazos y las ardillas recogían sus fragmentos,´los pájaros bajaron a sonreirle en la cara, como una burla.
Al atardecer cruzó el rio Lempa,  no habia un destino, pensó en la tía Maria, ella le habia llamado,  ahi por lo menos tendria un plato de frijoles y un petate por unos dias.
_Nunca, Nunca te perdonare _Dijo recordando a su hija.
El llanto  se asomó otra vez,  pero esta vez apretó los dientes...
_No mas. no mas _Se dijo.Ya estaba cansado de llorar, habia pasado su vida llorando por personas que no merecían sus lágrimas.

Quizas  él y su hija no vuelvan a encontrarse nunca más, quizas cuando  Arely  no pueda con el remordimiento  busque a su papito  por esos caminos que el anduvo, y recorra esas calles por donde se fue,  pero... ¡no se sabe! si el tiempo aun le dara otra oportunidad, si aun le consederá ese instante para pedir perdón  y abrazar a su padre.


Poesia... Tiempo Desps (Jose Reyes)
Ahora somos mas extraños
Y mas distantes,
Ahora estamos tan perdidos
Tan ahuyentados,
Ahora estamos mas peleados que tu y la cebolla,
Ahora estamos tan heridos
Como los civiles en las guerras de oriente medio,
Ahora nos hacemos tanto daño
Con nuestras ausencias
Y sin embargo nuestras sombras
Yacen juntas en el pasado.

La ventana ( Nair Latoff)
frescas gotas de lluvia  resbalan por la ventana,
en ellas distingo tu figura
mezclandose con el agua.
Palabras tristes dijimos,
silenciosas, frias y sin sentido
como el agua misma
que a la salida del sol se secaron.
Pienso en los días que pasaron
fueron suficientes o pocos
o los necesarios para amarte.
Yo, aprendí a quererte  en ese lapso.
El mar pasó por mi ventana
apagando el fuego que quedaba.
el sol en el vidrio tu figura dispersaba
lo recogió la tierra en una mañana clara
mas... yo aun sigo esperando
que las gotas de lluvia me regresen ...
tu figura en la ventana.

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